*Demuestra la sensibilidad del gobierno estatal para dialogar con la comunidad,
señala la integrante de la Cátedra de Cultura de la UNESCO, Lucina Jiménez
La Fábrica de Innovación es un ejemplo de política pública que coloca a Colima y a la
colonia El Tívoli en un escenario efectivamente de innovación y con esta infraestructura
Colima se coloca en la posibilidad de convertirse en un centro de formación para
vincular cultura y desarrollo, afirmó la integrante de la Cátedra de Cultura de la
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura
(UNESCO), Lucina Jiménez López.
Señaló que en la Fábrica de Innovación Tívoli se recuperó el espacio público para
fortalecer la convivencia comunitaria y construir nuevas oportunidades para la niñez, la
juventud y las mujeres que habitan en la colonia El Tívoli y en las zonas aledañas.
“La Fábrica hoy en día genera una expectativa tremenda para la comunidad que está
muy contenta de que se materialice una política pública de este calado porque además
fue hecha tomando en cuenta la opinión de la gente y forma parte del proceso de
reconstrucción de todo el espacio”, sostuvo la directora del Consorcio Internacional Arte
y Escuela A.C.(CONARTE).
Además la experta de la red mundial de Ciudades y gobiernos locales, con sede en
Barcelona, España, quien además forma parte del grupo de expertos de cultura y
desarrollo de la UNESCO, resaltó que este centro cultural y deportivo es muestra de la
sensibilidad que ha tenido el gobierno estatal para dialogar con la comunidad.
“El gobernador José Ignacio Peralta Sánchez es muy entusiasta de generar procesos
de comunidad, pero sostenibles, es decir, que no se queden solamente en una acción
coyuntural, sino que realmente generen condiciones para que socialmente se puedan ir
desarrollando otras capacidades para la prevención y erradicación de la violencia”,
señaló la representante de la UNESCO, quien añadió que el mandatario estatal ha
tenido un espíritu de apertura y colaboración en todos los niveles de gobierno para
concretar este proyecto integral e innovador.
Este tipo de proyectos es único en el país porque usualmente el desarrollo urbano
concluye solamente con la recuperación de espacios abiertos públicos, pero en este
caso se escuchó a la población para contar con una infraestructura más especializada,
aseguró Jiménez López.
“Por primera vez en el país se construye una Fábrica de Innovación como parte del
espacio público, que recoge el interés de la niñez y la juventud por el arte y el deporte”,
mencionó durante la entrevista.
Asimismo dijo que por medio de este tipo de proyectos se brinda la oportunidad de
articulación territorial en una zona que históricamente estaba muy dividida, ya que la
Fábrica permite romper esas fronteras y generar comunidad.
La Fábrica de Innovación Tívoli es fruto de un proceso largo, en donde se sumaron
esfuerzos articulados por el Gobierno del Estado, el gobierno federal a través de la
Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), el Ayuntamiento de
Colima y el acompañamiento de la sociedad civil, en este caso CONARTE, una
organización civil que se especializa en hacer trabajo cultural y artístico para el
desarrollo.
“Este centro es un lugar de cruce porque no sólo está atendiendo cuestiones de orden
cultural, sino cuestiones medioambientales y de empleo, por lo que genera esa
aspiración que hay en muchos lugares que consiste en vincular cultura y desarrollo”,
expresó.
La experta de cultura y desarrollo de la UNESCO imparte en la Fábrica de Innovación
Tívoli un taller sobre herramientas de interacción comunitaria desde la diversidad,
retomando el tema de derechos culturales como espacio para que los talleristas puedan
visualizarse a sí mismos como parte de esa transformación que está viviendo El Tívoli,
en donde el arte va encontrando esos caminos para lograr que las niñas y niños y la
juventud desarrollen otras habilidades sociales, expresivas, comunicativas y de
conciliación.